¿Qué es Ángeles con Patas?


viernes, 10 de febrero de 2017

¡Nos trasladamos!

El Blog de Ángeles con Patas cambia de dirección para poder ofrecer una mejor experiencia a nuestros lectores. Podréis encontrar todos los artículos ya publicados en nuestra nueva dirección, así como disfrutar de los que se vayan publicando próximamente. 

La nueva dirección de nuestro Blog es https://sonangelesconpatas.wordpress.com/. Además, podéis también encontrarnos en Facebook e Instagram (@sonangelesconpatas) y en Twitter (@angeles_patas) ¡Hasta la vista!


domingo, 29 de enero de 2017

¿Qué es la obediencia canina deportiva?


El próximo 1 y 2 de abril, os traeremos a Cádiz a Gonzalo Figueroa, unos de los mejores representantes de la obediencia deportiva, también conocida como OCI. Por eso queremos dejaros un breve resumen del esta disciplina, extraído del reglamento de la RSCE (Real Sociedad Canina Española).

Escudo de la Real Sociedad Canina de España

Puede parecer que la obediencia desde fuera se vea como algo que debe hacerse por presión y castigo al perro, pero realmente no es así, ya que se prohíbe cualquier tipo de castigo. En la obediencia deportiva se busca la compenetración perfecta entre perro y guía, y la ejecución perfecta de una serie de ejercicios donde ademas se valora la velocidad y disposición positiva, porte alegre y voluntarioso que deberá tener el perro.

Según el reglamento las obligaciones del guía como competidor comienzan cuando el guía entra en el terreno de la competición y termina después de la ceremonia final de entrega de premios.

Sobre el equipamiento del perro, el reglamento dice que solo se permiten collares normales (de hebilla o ajustables). Están prohibidos los collares con púas o eléctricos así como otros artilugios de contención o medios tales como los bozales. Esta restricción comienza al principio de la competición hasta el final.

El guía debería tener el perro a su izquierda durante y entre los ejercicios. Si existe alguna razón física o discapacidad, se permite al guía tener el perro en el lado derecho durante o entre los ejercicios.

Hay tres niveles de competición de obediencia, Clase 1, Clase 2 y Clase 3 también conocido por I (OCI- Obediencia Clase Internacional- FCI). Nosotros, para introducirnos al mundo de la obediencia expondremos los ejercicios de la Clase 1.

Existen otros niveles, por los cuales no es obligatorio pasar, pero si recomendable, pudiendo empezar directamente por Clase 1, que son los niveles elementales de CA-OB1 y CA-OB2.

¿Qué necesitaremos para desarrollar una competición de OCI?


En primer lugar el ring, que es la superficie donde se van a realizar los ejercicios. Para las Clases 2 y 3 el tamaño del ring en un lugar cerrado será de 20m x 30m, si la competición es al aire libre el ring será de 25m x 40m. Para la Clase 1 el ring puede ser un poco más pequeño.

Tendremos que disponer de unas vallas.
  • La valla cerrada de aproximadamente 1 m de ancho y ajustable en altura desde unos 10 cm hasta 70 cm a intervalos de 10 cm. Las barras laterales deberían ser de aproximadamente 1 m. En contraste con un obstáculo de agility, la valla no debería tener alas laterales.
  • La valla abierta con las mismas características que la cerrada, pero solo hay un borde de aproximadamente 3-5 cm de diámetro a la altura requerida y una fina barra de apoyo conectando los pies o barras laterales de abajo.

Otro de los elementos que vamos a necesitar es el apport, un objeto de cobro, en madera o metal, que tiene una forma de pesa y que el mayor de los apport de madera no debería superar los 450 gramos y el peso máximo en metal serían unos 200 gramos.

Apports de madera

Un breve resumen de los ejercicios que debemos ejecutar en la Clase 1


1. Sentado en un grupo durante 1 minuto, guía a la vista

El ejercicio comienza cuando todos los guías del grupo se colocan en una fila a aproximadamente 3 metros de distancia uno de otro con sus perros en la posición de junto y el comisario anuncia “Comienza el ejercicio”. Los guías abandonan a sus perros y caminan a un lado del ring y se colocan de frente a sus perros. Cuando pasa 1 minuto, caminan de vuelta hacia sus perros. Adoptan la posición de pie y quietos detrás de sus perros tras lo que se ordena a los guías que caminen hasta situarse al lado de sus perros. El ejercicio termina cuando los guías han vuelto con sus perros y el comisario ha anunciado “Fin del ejercicio”.

2. Junto
Se pone a prueba a un ritmo normal en combinación con giros a la izquierda y a la derecha, cambios de dirección y paradas.

3. De pie sobre la marcha
El guía y el perro abandonan el punto de partida caminando en línea recta a un ritmo normal. Después de unos 10 metros el guía, sin detenerse, ordenará al perro que permanezca de pie y el perro deberá pararse inmediatamente.

4. Llamada
El guía ordena al perro que se tumbe y comienza a caminar 20-25 metros en la dirección indicada al lugar asignado y dándose la vuelta. Con el permiso del comisario, el guía llama al perro.

5. Sentado o tumbado sobre la marcha
Guía y perro dejarán el punto de partida para caminar en línea recta a un ritmo normal. Después de unos 10 metros, el guía, sin detenerse, mandará al perro que se siente/tumbe y el perro deberá sentarse/tumbarse inmediatamente. El guía caminará unos 10 metros aproximadamente, se dará la vuelta y se parará frente al perro.

6. Envío al cuadrado y tumbado
Cuando el comisario da el permiso, el guía enviará al perro a un cuadrado de 3 m x 3 m. situado a aproximadamente 15 metros del punto de partida. El perro deberá moverse en línea recta al cuadrado y deberá entrar al cuadrado por la parte frontal.

Cuando el perro llega al cuadrado, el guía ordenará al perro que permanezca de pie y luego que se tumbe o directamente que se tumbe.

7. Cobro de un apport de madera
El comisario anunciará el inicio del ejercicio y entregará el apport de madera al guía. El guía lanzará el apport a la orden del comisario a una distancia de al menos 10 metros. Cuando sea indicado, el guía ordenará al perro que traiga el apport.

8. Control a distancia

El perro deberá cambiar de posición cuatro veces (sienta / tumba) de acuerdo con los comandos del guía y mantenerse en su sitio original.

9. Llamada con salto
El guía se coloca en frente de una valla con el perro sentado en la posición de junto. El comisario anuncia el comienzo del ejercicio y ordena al guía dejar al perro sentado delante del salto. El guía pasará alrededor del salto hasta el otro lado, y mandará que el perro salte por indicación del comisario. El perro deberá saltar y colocarse en posición de junto.

10. Envío alrededor de un cono y vuelta

El guía permanece con el perro en la posición de junto en el punto de partida de cara a un cono. El guía envía a su perro desde el punto de partida a correr alrededor del cono. El perro debería correr alrededor del cono y volver con el guía y adoptar la posición de junto.

Esto es solo un muy breve y reducido resumen del reglamento y la competición, si verdaderamente quieres saber lo útil, divertido y bonito que puede llegar a ser la obediencia como deporte y en tu vida diaria, te esperamos el 1 y 2 de abril en nuestro seminario con Gonzalo Figueroa. No te lo pierdas y haz tu inscripción guía + perro por 120€, o guía sin perro por 60€. Te esperamos.

viernes, 20 de enero de 2017

Clases gratuitas de obediencia y agility

Llega el mes de febrero y atrás quedan los polvorones, los villancicos y las noches de fiesta. El 2017 viene cargado de nuevos y grandes propósitos y nosotros queremos ayudarte a que en este nuevo año te diviertas en compañía de tu mejor amigo. Por eso en febrero te ofrecemos clases gratuitas de agility y obediencia. En ambos casos, las clases consistirán en cuatro sesiones de una hora y media, una vez a la semana, contando con un total de 6 horas mensuales.

¿En qué aprovecharemos esas 6 horas de agility? 


Todas las sesiones serán, casi en su totalidad, practicas. En la primera sesión (de hora y media) explicaremos cada uno de los obstáculos que conformarán la pista, y como debemos ejecutarlos e iniciarnos en cada uno de ellos con nuestros perros. En la segunda sesión haremos unos ejercicios básicos con lo aprendido previamente, como correr un poco al lado de nuestro perrito mientras vamos indicándole qué debe hacer. Será muy divertido. Durante la tercera sesión veremos las zonas de contacto y algunas formas de ejecutarlas y nos divertiremos jugando con ellas y con nuestros peludos. Finalmente, en la cuarta, aprenderemos algunos ejercicios, combinando una serie de obstáculos para aprender un poco sobre técnicas de conducción.

¿En qué aprovecharemos esas 6 horas de obediencia?


En obediencia, las sesiones serán divertidas, relajadas y amenas, donde disfrutaremos todos, tanto guías como perros. Para nuestra primera sesión aprenderemos a jugar con nuestro perro y le enseñaremos cuando empezar y cuando parar. Comprobaremos qué tal responde a su nombre y a la llamada para poder mejorarla. En la siguiente sesión enseñaremos los movimientos basicos necesarios a la hora de trabajar la obediencia. En la tercera aprenderemos algunas técnicas para manejar a nuestro perro con las manos sin necesidad de manipularlo, por ejemplo con una correa. Y por último repasaremos todo lo visto a fin de afianzar los conocimientos.

En agility y obediencia todo dependerá del nivel de los asistentes. Recuerda que quien tiene que aprender eres tú para poder comunicarte de una manera positiva con tu perro.
Contacta con nosotros a través de nuestra página de Facebook (https://www.facebook.com/sonangelesconpatas/) o mediante el teléfono 692 51 22 83. ¡Te esperamos!


domingo, 15 de enero de 2017

Elegir un perro: guía práctica para no equivocarse

Han sido muchísimos los motivos por lo que hemos decidido tener un perro en casa y casi todos esos motivos dejan de existir al poco tiempo de estar en la familia. Una agenda apretada, un ritmo de trabajo frenético, cuidar de la familia, ir al gimnasio, quedar con los amigos, y otras muchas actividades cotidianas, son las que han conseguido que hayas perdido u olvidado el valor por el que lo invitaste a formar parte de tu familia. A la hora de aumentar nuestra familia con un miembro canino, deberíamos detenernos un segundo a pensar si verdaderamente vamos a poder atender sus necesidades.

El Gran Danés, por ejemplo, puede parecemos una raza muy bonita, un temperamento muy bueno para convivir en familia, pero debemos pensar en su tamaño, según el estándar de la FCI, la medida en la cruz, (punto de referencia para medir al perro, que sobresale cerca del cuello y es el punto más alto del omóplato), oscila en los machos entre un mínimo de 80 cm y un máximo de 90, y en las hembras un mínimo de 72 cm y un máximo de 84 cm, salvo circunstancias especiales a nadie se le ocurriría criar a uno de estos bellísimos perros en un piso de 60 metros cuadrados. Este es un ejemplo extremo pero a cuantas personas conocemos que se han dejado llevar por la raza porque les encanta su físico pero después resulta ser un perro con un temperamento que no se adapta nuestro ritmo de vida. Pongamos el ejemplo del Beagle, un perro que podemos considerar de tamaño pequeño, su medida a la cruz suele ser de 35 a 45 cm, sería ideal para convivir en pequeños espacios, pero solo hablamos de su tamaño. Si investigamos un poco sobre sus orígenes nos encontramos a un cazador nato, un perro lleno de energía, que ladra para avisarte, saldrá a buscar presas y será feliz mostrando tu hazaña. O como por ejemplo el Borde Collie, un perro muy cariñoso y familiar capaz de sacar lo mejor de ti con solo mirarte, pero detrás de esa mirada hay todo un pastor incansable, infatigable, con energía suficiente para dominar a un rebaño, que no cesará en su trabajo hasta que se lo ordenes y aún así te mirará como un niño, pidiéndote, por favor, seguir jugando.

Esto solo son tres ejemplos, existen muchísimas razas y también perros que no tienen raza pero son igualmente bonitos e inteligentes, que podrían enamorarte, y su temperamento y carácter podrá adaptarse a la compañía que te gustaría tener.

Nuestro consejo antes de que aumentes tu familia, es que pienses que un amigo de cuatro patas puede vivir entre 10 y 15 años y debes estar preparado o preparada para ser el responsable de esa vida, que tiene las mismas necesidades que tú; comer, dormir, no pasar frío en invierno, no sufrir el sol en verano, visitas al médico, horas de esparcimiento y amor, sobre todo mucho amor, porque él solo dependerá de ti. Tú tendrás otras obligaciones, otras diversiones y otros hábitos, mientras que esa indefensa criatura te esperará cada día con un saludo enorme como si te hubieses marchado un año, te será leal y fiel y jamás tendrá para ti un mal gesto, por eso no debes estructurar tu vida pensando en que un perro es un artículo ornamental, si no pensando que es una parte de ti y de tu familia. Si no eres capaz de dedicar a tu perro un mínimo de 3 horas diarias, cuando es adulto, nuestro consejo es que deberías esperar un poco más hasta poder dedicarle ese tiempo.

Si estás pensando en un cachorro deberías llevarlo a casa en un periodo vacacional o en algún momento que pudieras dedicarle el tiempo para su aprendizaje, y si te es posible  que tenga entre 50 y 60 días aproximadamente, ya que es cuando el cachorro esta más abierto a las nuevas experiencias y enseñanzas.

No necesariamente debes renunciar a la raza o perro que quieras tener, pero sí debes tener en cuenta que él va a adaptar su vida a tus necesidades, y tú deberías corresponderle adaptando tu vida a las suyas. Un perro no necesita dinero para divertirse, solo necesita que le dediques tiempo, el mismo que dedicas a tu familia, porque él es tu familia también.

sábado, 7 de enero de 2017

Enseña y aprende en positivo

Las relaciones entre seres vivos siempre son complicadas, incluso cuando hablamos el mismo idioma. ¿Cuantas veces has creído conocer perfectamente a un amigo, a tu pareja, a tu hermano, a las personas mas cercanas a ti, y te llevas una sorpresa cuando te enteras de algo que desconocías?

Adiestramiento, obediencia, educación, son términos que se buscan cuando tenemos un perro en casa. Puede ser que nos entendamos perfectamente con nuestro amigo desde el principio, o que nos entendiéramos muy bien y en algún momento, sin saber porque, dejamos de hacerlo. También puede darse el caso en que la relación sea difícil desde el minuto uno.

En cualquiera de estas situaciones lo que importa es aprender como puede pensar tu amigo de cuatro patas y buscar a alguien que pueda ayudarte verdaderamente, y no importa si la relación con tu peludo es buenísima, siempre la puedes mejorar y aprender.

Lo primero que debes pensar si vas a educar o adiestrar a tu perro es que no puedes conformarte con cualquier cosa. Pregunta e infórmate; quizá crees que técnicas de adiestramiento, como pegar tirones a las correas, o someter a tu perro puede funcionar, pero siempre empeoran la conducta y la relación contigo. Nuestro consejo es que empieces a buscar maneras positivas de controlar a tu perro, sin aplicar ningún “castigo”, ni cosas que le resulten incomodas, o puedan atentar contra su integridad física.

Normalmente queremos para nuestro peludo algún útil a la hora del adiestramiento, que creemos que nos va a servir, simplemente porque alguien nos dijo que le había funcionado, o lo hemos visto usar y ya creemos que sabemos darle uso. De inmediato vamos a la tienda y compramos un collar anti-tirones, un bozal, collar de castigo, un collar eléctrico, etc, nunca lo hemos usado y ni siquiera sabemos como se pone, ní siquiera sabemos si hay otros mejores que el que hemos adquirido, pero creemos que cuando se lo pongamos a nuestro perro todo cambiará como si fuese una cosa mágica, la cual no necesita aprendizaje por nuestra parte.

Si quieres educar y llevarte bien con tu peludo, lo que debes pensar es que no es necesario hacerle pasar por un calvario de tirones, sometimiento y artículos que puedan hacerle daño, piensa que cada golpe, tirón o descarga que le das, él no va a entender por qué quieres hacerle daño y tú dejas de ser humano y te conviertes en su principal aversión.

No te lances a la aventura a la hora de educar. Al igual que existen centros especializados en la educación humana, existen centros especializados en la educación canina, donde pueden ayudarte, orientarte y ser tu guía. Recuerda que la relación que se forje entre tu peludo y tú dependerá de la educación que tú decidas darle.